Neuroplasticidad y Reiki

Tus pensamientos, tus sentimientos y tu conciencia pueden cambiar tu cuerpo y tu alma. Hoy en día incluso la ciencia moderna corrobora este hecho. La mente del ser humano varía según lo que piensa o siente. A través de un proceso de disciplina del pensamiento y de la forma de sentir, la materia cerebral se ve estimulada y sufre variaciones. Este proceso se conoce como neuroplasticidad, el desarrollo o nuevo desarrollo o nuevo encadenamiento de las células nerviosas y seguramente es transferido a lo largo de los años al organismo en su totalidad y es además comprendido. En el transcurso de una terapia de Reiki, la estructura de todo el cuerpo es irradiada por una luz y va a sufrir una transformación positiva. Esto se demostrará en cada tratamiento, sobre todo en las terapias con niños es muy efectiva. El paciente tendrá la salud en sus manos, imágenes positivas sustituirán a las negativas y la vida le volverá a sonreír. El cerebro humano y todo el organismo tienen que adaptarse continuamente a las situaciones cotidianas actuales y a las que son nuevas para poder sobrevivir. Estas circunstancias vitales se pueden cambiar gracias al Reiki y esto se consigue concretamente a través de una reestructuración de todo el organismo. Tiene lugar en el cerebro humano por medio de la formación de nuevos puntos de conexión entre las neuronas (sinapsis) o a través del refuerzo de los puntos ya presentes. Las células nerviosas están comunicadas unas con otras a través de unos pelillos llamados dendritas. El hecho de que las dendritas desmochadas en las neuronas dañadas consigan en volver a regenerarse, y en verdad muchas lo consiguen, depende supuestamente de la estimulación del hemisferio cerebral correspondiente (en nuestro caso el Reiki lo consigue por medio de contacto). Se cree, que solo una única dendrita ya puede restablecer la comunicación con otras zonas del cerebro.

Esta conexión y el crecimiento de las dendritas se pueden observar en tu cliente en el transcurso de un largo periodo de tratamiento. La creencia de que las neuronas no son capaces de reproducirse en la edad adulta, ha sido rechazada por la ciencia. Por lo visto, esto tiene que ver con la estimulación positiva de los pensamientos y de los sentidos, del movimiento y con el entorno en el que viven la persona o el animal. La parte más importante de la neuroplasticidad es, en el sentido de una vida plena y feliz, la atención espiritual. Los nuevos caminos emocionales y mentales deben ser recorridos conscientemente. Desde ese punto de vista, resulta beneficioso vivir en todos los ámbitos de forma correcta, saludable y positiva. Por esta razón, en todas las escuelas espirituales, así como en Reiki, se valora especialmente el entrenamiento de la mente. En el budismo tibetano se utiliza a veces la expresión: “Domar el Espíritu”. De esta manera, el animal recibe una disciplina, el pensamiento y el sentimiento ya no son los “Dueños de Casa”, sino que se convierten en los sirvientes. El amo pasa a ser el puro espíritu, la consciencia, el vacío y el desahogo interior. En esta espaciosidad cabe todo lo que es.